LITA Y EL BUFEO

Eran fiestas patronales en Moyobamba y el albedrío no era menos, fiestas por las diferentes puntas turísticas de Moyobamba. El Puerto de Tahuishco no era la excepción; por doquier las Humishas y adornos se veían, los habitantes de la hermosa ciudad de Moyobamba saludaban alegre y cordialmente a los visitantes que venían de fuera.

En las fiestas las mujeres lucían su esplendor bailando la "pandilla" el baile costumbrista alrededor de las Humishas; una de ellas llamada Lita era la más bella de las damas, su baile lleno de coqueteo infundía a que los hombres acompañasen el baile.

Lita era una chica muy sencilla, su belleza la hacía ver como una niña, cuando ya bordeaba los 18 años, era pretendida por muchos pero nunca pensaba en comprometerse debido a que su corazón aun no podía ser conquistado.

En una de aquellas fiestas, Lita se dispuso pasear por el Río Mayo en un bote conducida por su primo, iban por playas y jugaban, en una de esas playas, en medio del Río un Bufeo  quedo prendado de la belleza de  Lita, y comenzó a perseguir al bote para ver en donde vivía la muchacha. El Bufeo es un delfín de río que adopta la personalidad de una persona y seduce a los humanos para luego desaparecer con ellos en las profundidades del rió.

El Bufeo pidió ayuda al Tapir, quien en noches veía los sueños de las personas y si eran malos se los comía, le pidió de favor que vea os sueños de  tan linda muchacha para saber qué era lo que a ella le gustaba.

Y El tapir le mostró los sueños de Lita, a lo que el Bufeo encantado decidió tramar un plan para raptar a la hermosa chica.

En la semana final de fiesta el puerto de Tahuishco iba a tener una fiesta muy amena, todo estaba preparado, llegada la noche el baile comenzó con el sonido del acordeón, los invitados bailaban al son del ritmo de pandillas, el ritmo era contagiante, Uno de los Invitados nunca antes visto, galantemente vestido y con un sombrero de copa, se acercó e invito a Lita a un baile, ella acepto y bailaron sin despegarse el uno del otro.

Terminado el baile se sentaron y dialogaban, Lita estaba intrigada de tan apuesto caballero, quien nunca se sacaba el sombrero, el padre de Lita invito a tan distinguido caballero a unirse a su grupo y charlar ya que veían al caballero como un buen partido para su hija, el padre de Lita y sus amigo incitaban al joven a beber el cual no aceptaba las ofertas ya que era el mismísimo Bufeo disfrazado, se dice que si el Bufeo bebía licor el hechizo se rompería.

El Padre invitaba al joven a beber, Lita al ver en apuros a su galante caballero intervino e invito a dar un paseo, ya era medianoche y el Bufeo sabiendo que pronto amanecería, incitaba a la joven visitar el río y sentarse a observarlo; Lita accedió y comenzaron a dialogar sobre romances, el Bufeo enamoraba a Lita y ella accedía a su amor, el padre de la muchacha vio muy solos a la pareja y decidió ir con sus amigos a beber con ellos y felicitar a la pareja, ya que el padre en sus ambiciones creía que el joven tenía mucho dinero por el modo de vestir, tanta fue la insistencia que obligaron al joven a beber, este bebía sin poner condiciones ya que Lita le prometió ir al río luego de beber con su padre, ya eran las dos de la mañana y el joven estaba ebrio, los padres y vecinos también, cuando la chica dio un grito ya que la piel del joven se volvía rosada, y su sombrero había caído;  todos estaban anonadados ya que era el Bufeo Colorado en persona, se persignaron y llenos de ira lo atacaron ya que sabían que quería raptar a la bella muchacha.

Lo golpearon varias veces y este término huyendo al río donde se transformó por completo pero estaba muy débil y no podía nadar muy bien, las aguas del Río Mayo lo arrastraron y quedo atrapado en una palizada donde murió.

Algunos bogas que pasaron por ahí unos días después encontraron al delfín de río carcomido por los peces, lo sacaron de allí y lo  arrojaron nuevamente al río.

Se cuenta que el Bufeo antes de morir agónicamente, indicó al Tapir que en los sueños de Lita ella sueñe con él, para que pueda llevársela en sueños, el Tapir hizo eso sin presagiar que el Bufeo no dejaría que Lita despertase.

AUTOR :  JOSE ANTONIO CORDOVA WAJAJAY

DERECHOS RESERVADOS